Considero que el proceso de cría y reproducción de periquitos es el proceso más bonito que podemos experimentar cuando se tienen periquitos, pero siempre hay que tener unos conocimientos previos para que todo salga bien y si surge algún problema, podamos solucionarlo sin poner en peligro a ninguno de los padres o futuras crías.
Cómo empezar:
En primer lugar de lo que tienes que estar completamente seguro es de que tienes un macho y una hembra, siempre se puede dar el caso de que tengamos dos hembras o dos machos y no nos demos cuenta de ello. Fíjate bien en la cera, no suele fallar excepto en algunas especies en las que los machos también lo tienen rosa, como los píos recesivos los lutinos, albinos, flavos y lacewings. Ver apartado de ceras
Siguiente paso: ¿Se gustan?
Una vez adquirida la pareja hay que ver el comportamiento que tienen entre ellos.
Para saber si se gustan hay varias señales que podemos observar.
- Pasan mucho tiempo juntos, incluso puede que duerman uno al lado del otro, totalmente pegados.
- Se pasan comida.
- Se dan besitos.
- Se limpian entre ellos.
- El macho corteja a la hembra, y ésta le corresponde.
- Si la hembra se pone en posición V, significa que está preparada para el apareamiento y le ha correspondido totalmente!! Es la señal más clara de todas.
Conocer la edad de nuestros periquitos
Si tienen el típico comportamiento de pareja es una buena señal, pero ante todo hay que tener mucho cuidado con el tiempo que tienen nuestros periquitos, ya que lo recomendable es que ambos tengan un año de edad porque en el caso de que no tuviesen el año, podrían tener problemas en su total desarrollo, y la hembra también tendría más dificultades al realizar la puesta de huevos. Ver apartado pautas para una buena elección
¿Qué nido debo comprar?
En cuanto al nido, debe ser de base rectangular, pero la base siempre tiene que ser más larga que la altura que tenga el nido, ya que dentro del nido nunca van a querer subir hacia arriba, lo que interesa es que tengan el mayor espacio posible.
Material: son de madera
Tapa: dependiendo del nido, se abre hacia arriba o se desliza hacia un lado (se pueden encontrar en cualquier pajarería)
Base del suelo: suele ser o un poco curvada, o tener una especie de círculo para que les sea más fácil depositar los huevos y así no se les resbalaren hacia un lado y otro.
[smartads]
¿Puedo ponerles el nido en su jaula habitual?
Hay varios casos y situaciones que pueden darse, aunque lo más aconsejable es comprarles una jaula de cría porque son más prácticas y a la hora de que salgan los polluelos del nido no hay tanta distancia al suelo de la jaula, como en otra que pueda tener más altura.
Sólo tengo una pareja
En este caso siempre y cuando la jaula tenga más de una puerta, pueden criar en su misma jaula, aunque recuerdo lo mencionado a la altura.
Si la jaula sólo tiene una puerta, es mejor comprar una jaula de cría, más que nada por si necesitamos introducir la mano para cambiarles la comida, cambiarles algún palo, si se les cae algún juguete…pueden darse muchas situaciones por las que sea necesario en algún momento introducir la mano en la jaula, y si tenemos la única puerta “tapada” y sin acceso, esto nos resultará imposible, o tendremos que andar molestando a la hembra, lo cual no es muy aconsejable y menos si son primerizos.
Tengo varios periquitos
Sin ninguna duda es necesario que les compres una jaula de cría. Cuando tenemos varios periquitos y queremos que nos crie una pareja, lo primero que tenemos que hacer es separarlos para que estén tranquilos y no haya peleas u otros problemas.
Excepción: si tienes una pajarera lo suficientemente grande para que cada uno tenga su “territorio” podrías ponerle varios nidos y así evitar peleas entre hembras (aunque no siempre se pueden evitar). No tiene porque pasar nada, de hecho hay muchas personas que crían de esta forma y nunca les ha pasado nada, pero aún así creo que es mejor separarles del resto, porque te aseguras que van a estar centrados a lo suyo y no en los posibles problemas que puedan acarrearles otros periquitos.
Si cumples todos estos requisitos ya puedes empezar con la cría de periquitos.
¡¡ojo!! Procura no ponerlo en el suelo, ya que lo más seguro es que los periquitos se sientan inseguros y pasen del nido. Cuanto estén más altas las cosas tienen mucha más confianza, así que sólo tienes que engancharlo con las clavijas (que suelen venir con el nido) y ya está. La periquita durante los primeros días se pondrá a curiosear el nido y a acoplarlo a su manera, esto es, si la periquita lo rasca y puede que le haga algunos boquetes. No te preocupes, es normal, es como si estuvieran “amueblando” su casa.
Fijaos en este caso como ha mordido la parte superior del nido y los laterales (lo rayado, no es que sea así, es la hembra que lo rascó para hacer serrín).
El apareamiento
Está claro que para que nazcan nuestros pollitos es necesario que se produzca este paso.
El macho comenzará con el cortejo como otras muchas veces habrá hecho anteriormente, pero habrá un cambio en la hembra. Se le contraen las pupilas y adquiere posición en V, lo que quiere decir que está preparada para que el macho la monte.
Si queréis ver un reportaje fotográfico de este proceso hacer click aquí
Puesta de los huevos
Ahora toca esperar. El tiempo que transcurre desde que los periquitos han copulado hasta que la periquita ponga los huevos es de unos 8 o 9 días, pasado este tiempo, la periquita pondrá el primer huevo.
Una vez que ponga el primer huevo, los siguientes huevos los pondrá en días alternos (un día sí, un día no), hasta que complete la puesta.
Normalmente ponen entre 4 y 8 huevos por puesta.
Hay periquitos que aunque no tengan nido, se aparean. En principio no tiene que resultar preocupante puesto que si no tienen nido, no tendrán crías, es un comportamiento más que une a una pareja.
Puede darse el caso de que la hembra empiece a poner huevos de forma descontrolada sin tener nido. Son casos extremos que normalmente no se dan, y menos si son periquitos que nunca han criado. Suelen ser por problemas hormonales y resulta bastante difícil conseguir que la hembra deje de poner huevos. Nunca dejéis que vuestros periquitos críen según terminan con una nidada, os evitaréis que pueda surgir este tipo de problema.
Lo ideal sería ponerles a criar una vez al año, dos como mucho cada seis meses, porque los padres se “desgastan” mucho cada vez que crían, sobre todo las hembras. En el caso de que los huevos no estén fecundados, hay que retirárselos antes de que la periquita comience una nueva puesta, ya que dos puestas seguidas les debilitan mucho.
Importante: siempre tenéis que administrar calcio a vuestros periquitos. Durante la puesta, las hembras utilizan mucho carbonato cálcico para la formación de los huevos, y necesitan reponerlo.
Aparte del calcio, tenéis que darles una buena alimentación con frutas, verduras, pasta de cría…
Y otra cosa por la que no os debéis preocupar, es de las heces que expulsa la madre, que son de un tamaño mucho mayor debido al tiempo que está incubando en el nido, ya que sale lo mínimo, para limpiarse y hacer sus necesidades (normalmente el macho las da de comer).
Nacimiento
La cría nacerá a los 18 días desde que la hembra puso el huevo. Hay casos en que pueden salir un poco antes, o un poco después (16 y 20 días).
Cuando nacen, salen sin plumas y con los ojos cerrados, los ojos hasta el séptimo u octavo día no los abren. Durante la primera semana la madre les alimenta con lo que se llama “leche de periquita” que es una sustancia que segregan cuando están criando y en ningún caso puede ser reemplazada por la papilla de la cría a mano, ya que contiene nutrientes indispensables para el desarrollo del polluelo.
Un poco después les comienza a salir el plumón que recubrirá todo su cuerpo. Si os fijáis, podréis observar que las crías tienen abultada la parte del cuello. No os alarméis porque eso es el buche y cuando son un poquito más grandecitos se les pueden diferenciar muy bien las semillas.
Seguidamente les saldrán las remeras, y poco a poco les irán saliendo todas las plumas .
Una vez que las crías hayan salido del nido (lo cual suelen hacer alrededor de las 4 o 5 semanas), lo más aconsejable es que estén cerca de los padres para que les puedan seguir alimentando durante unos días, hasta que las crías por sí solas aprendan a comer. Si les puedes tener en una jaula con separadores mejor que mejor, ya que de esta manera evitas el que los padres puedan dañar a las crías, pero pueden seguir alimentándolas.
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