El comportamiento de los periquitos es algo fascinante y divertido muchas veces, y quiero mostraros las pautas más elementales para que podáis conocer a vuestros periquitos.
Lo que nos quieren decir por su manera de cantar:
- Cuando emiten un suave gorjeo, como si estuvieran hablando nos muestran que están tranquilos y relajados. Esto lo suelen hacer mucho más los machos que las hembras, aunque puedo afirmar que las hembras también lo hacen.
- Cuando emiten un sonido muy fuerte, que nos puede recordar al de otra ave, como un loro, lo más seguro es que se sienta insatisfecho con algo, esto es, que quiere salir, que le pongas comida….
- Cuando emiten una especie de “grito” no tan fuerte como el anterior, pero más insistente y de intervalos cortos, lo más seguro es que esté llamando a su pareja (si es que no se encuentra en el mismo sitio, o la ha perdido hace poco tiempo..) o ha podido divisar a otro ave desde la ventana.
[smartads]
Lo que nos quieren decir por su forma de actuar:
- Si tienen la cabeza escondida entre las plumas es que tienen sueño, y por lo visto les debe resultar muy cómoda la postura.
- Cuando se dan besitos y se rascan la zona del cuello, lo hacen para quitar la vaina de queratina que recubre las plumas de su cuello, porque ellos mismos no llegan, y se puede decir que se ayudan en esta tarea entre ellos. Aparte de esto, les ayuda a reforzar vínculos entre ellos.
- Dedican mucho tiempo a la limpieza del resto de su cuerpo. Para ello utilizan la glándula uropígea, la cual segrega una especie de aceite que les sirve para limpiarse las plumas y para impermeabilizarlas. Se encuentra al principio de la cola, por la parte superior, justo donde muestra la foto que se está “rascando” el periquito.
- Si vemos que nuestro periquito tiene las alitas separadas del cuerpo y mueve la boca como si quisiera agua o estuviera acalorado, es precisamente por eso, porque tiene calor.
- En cuanto al tema de las peleas, hay que decir que se producen con mucha más frecuencia entre hembras que entre machos. Las hembras tienden a ser mucho más dominantes, y si hay un solo macho a su disposición intentarán quedárselo a toda costa y puede llegar a acabar muy mal si no le ponemos remedio, por ejemplo comprándoles un nuevo macho, y de esta forma que cada una elija el que más le guste.
Las peleas entre machos no suelen darse con tanta frecuencia, y si ocurren, el motivo será la rivalidad por una hembra.
También se puede dar el caso de que haya peleas entre un macho y una hembra. Por las experiencias que he vivido y que he conocido en otras personas, suelen darse cuando la hembra quiere criar o adquirir una pareja.
Muchas veces se puede pensar que lo que pasa es que a la hembra no le gusta el macho para nada, cuando en realidad es todo lo contrario.
Lo que hacen es ir como locas detrás del macho persiguiéndole por toda la jaula para ver si éste demuestra su fuerza (que sea apto para la reproducción), pero si el macho “no la corresponde” y por el contrario se muestra asustadizo y débil, la hembra puede seguir atacándole, en algunos casos llegando a matarles. Hay que tener mucho cuidado con este comportamiento, y si alguna vez lo viéramos es aconsejable que lo observéis detenidamente durante un tiempo y si no acabáis de fiaros de que puedan llevarse bien, es mejor separarles, a no tener que lamentarse más tarde.
- Si ves que tu periquito rasca el pico contra los barrotes date por satisfecho, porque eso significa que se encuentra muy a gusto en el sitio en el que vive (no todos lo hacen), o bien está limpiándose algún resto de comida que tenga en el pico.
- A veces vemos que el periquito está apoyado en una sola pata. Esto quiere decir que está muy relajado y a gusto. Probablemente coma mientras esté en esta posición.
- Si nuestros periquitos bostezan puede ser por varios motivos: tienen sueño, están aburridos, o quieren desentumecer los músculos del pico.
- Cuando están de ligue, es lo más bonito y gracioso de tener una pareja. El macho es el que tiene que empezar a cortejar a la hembra, aunque a la hora de la verdad es la hembra la que decide si hace pareja con el macho o no. El macho emite un gorjeo a la hembra y empieza a darse golpecitos con lo que tenga a su lado, puede ser los barrotes, el pico de la hembra…lo que sea, y lo hace para demostrarle a la hembra lo fuerte que es. Si a la hembra le ha gustado el macho, le seguirá el juego, y empezaran a darse
besitos y a tener el típico comportamiento entre parejas, se rascarán, se pasarán comida…Cuando llegue el momento de pasar a la siguiente fase (si no tienen el nido, lo normal es que no lleguen a esta fase, lo hacen por instinto) el macho le colocara como quien no quiere la cosa la pata sobre su “espalda” y la hembra se colocará con la cola y la cabeza hacia arriba (en forma de V, para haceros una idea), y después de esto, lo más posible es que se agrande la familia!! Puede darse el caso de que haya dos machos que aparentemente adquieran el comportamiento de una pareja, rascándose entre ellos y pasándose comida. Es una muestra más de cariño y confianza entre ellos, no hay de qué preocuparse, si alguna vez uno de ellos quisiera montar al otro, lo más seguro es que se lo impida! Este comportamiento también puede darse entre hembras, pero es menos frecuente.
- Si encuentras que tu periquito tiene las plumas erizadas, no es buena señal, y si además lo encuentras decaído y sin apetito, lo que deberías hacer es llevarlo a un veterinario cuanto antes.
- Al estirar las alas y patas nos muestran que necesitan relajar los músculos y estirarse, (igual que nos sucede a los humanos), cuando han estado un largo tiempo durmiendo o en la misma posición.
- Cuando tienen miedo, el plumaje lo tienen totalmente pegado al cuerpo y aparentemente están muy estirados.
- Puede ocurrir que veas a tu periquito con el plumaje pegado al cuerpo, pero por el contrario las plumas de la cabeza están levantadas y los ojos contraídos. A su vez seguramente emita algún sonido que nos avisa de que se encuentra amenazado y esa es su manera de decir “quieto, que aquí estoy yo”. Además pueden hacer un movimiento de alas como si fueran a aletear, pero no llegan a hacerlo, otra muestra más de reclamar lo que es suyo, o que están enfadados.
- Son muy curiosos. Normalmente si te fijas, estarán mirando todo lo que haces o lo que hacen sus amiguitos.
- Son animales muy sociables, y les encanta estar con muchos periquitos.
- Otra cosa, si tienes un solo periquito, lo más seguro es que se encuentre más triste, porque nosotros no podemos realizar todas estas tareas que he mencionado antes, por muchos mimos que le demos, así que no dudes en comprarle una pareja si está solo, que seguro que te lo agradece, y a ti te encantará ver cómo se comporta con otro periquito, te lo aseguro!
- Como ya se ha comentado anteriormente en el adiestramiento, a los periquitos no les suele gustar que les cojan, pero esto no siempre es así. Actualmente tengo 2 periquitas que no las molesta que las coja (eso sí, las he tenido desde que eran un huevo y siempre han estado acostumbradas a mi,tal vez esta sea la excepción a la regla), podeis comprobarlo en estas fotos en las que se ve a la hembra que incluso adopta una posición tan comoda que “cruza” sus patitas. En ningún momento la aprieto, ya que si lo hiciera os puedo asegurar que no adoptaría esa posición tan peculiar. Este “cruce” de patas creo que es algo genético, ya que hay varios miembros de la familia que lo han hecho.
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